Peter Turkson podría convertirse en el primer papa africano tras la muerte de Francisco

El fallecimiento del papa Francisco marca el inicio de una nueva etapa decisiva en la Iglesia católica. Con la silla de San Pedro vacante, el Vaticano se prepara para un nuevo cónclave que reunirá a más de 100 cardenales de todo el mundo, quienes tendrán la misión de elegir al próximo líder espiritual de más de 1.300 millones de fieles. En medio de esta expectación global, un nombre resuena con fuerza entre los posibles sucesores: el del cardenal Peter Turkson, originario de Ghana.

Nacido el 11 de octubre de 1948 en la localidad ghanesa de Nsuta, Peter Kodwo Appiah Turkson ha dedicado toda su vida al servicio de la fe. Fue ordenado sacerdote en 1975 y, años más tarde, en 2003, el papa Juan Pablo II lo nombró cardenal. Desde entonces, su ascenso dentro del Vaticano ha sido constante, ocupando cargos clave en temas de justicia social, desarrollo humano y derechos universales.

Turkson presidió el extinto Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz, promoviendo políticas que abogaban por los derechos de los más pobres y marginados. Más adelante, el papa Francisco lo designó prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, desde donde lideró debates sobre migración, ecología, pobreza extrema y crisis globales. Además, ha representado al Vaticano en escenarios de talla mundial como el Foro Económico de Davos.

Además de hablar seis idiomas y tener un profundo conocimiento de la realidad global, Peter Turkson es admirado por su mirada progresista y su firme compromiso con la justicia climática y social. A sus 76 años, se ha consolidado como una de las figuras más respetadas dentro del Vaticano. Su perfil encarna valores muy similares a los del papa Francisco: sencillez, enfoque en los más vulnerables y una visión inclusiva del catolicismo.

Según reportes de la agencia EFE, el cónclave está previsto entre 15 y 20 días después del fallecimiento del pontífice. Solo los cardenales menores de 80 años tendrán derecho a voto en este proceso altamente reservado. En ese contexto, la figura de Turkson emerge como una posibilidad histórica: de ser elegido, se convertiría en el primer papa africano de la era moderna, un hecho sin precedentes en la historia reciente de la Iglesia católica.