"No es broma, es violencia": hashtag creado para que no se normalice broma sobre acoso sexual dicha por Ricardo Mendoza

Uno de los presentadores de Hablando huevadas, Ricardo Mendoza, generó gran indignación y rechazo, después de burlarse sobre un caso de agresión sexual que sufrió una menor. El comediante junto a compañera Norka Gaspar se refirieron con mucha ligereza al acoso sexual que sufrió una niña en un transporte público.

Muy enojados por la irresponsabilidad con la que los comediantes hablaron sobre el tema, miles de cibernautas en redes sociales manifestaron su total rechazo mediante la creación de un hashtag #NoEsBromaEsViolencia en Twitter. Por su parte, diversas personalidades criticaron las expresiones emitidas en el canal de YouTube.

Entre ellas, Ana Jara expresidente del Consejo de Ministros del Perú, y la exministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables del Perú, Rosario Sasieta, quien exigió una sanción para Ricardo Mendoza y Norka Gaspar por bromear sobre una agresión sexual a una niña.

“Quien se burla de una niña que ha sido víctima de un delito sexual no merece nada en la vida. Pido públicamente sean denunciados. Es imperativo que Fiscalía formule denuncia penal contra estos sujetos”, sostuvo Sasieta, que ha recibido el apoyo de varios internautas en redes sociales.

“Cultura de la violación es cuando conviertes en un chiste la agresión sexual que sufrió una niña. Que un hombre te toque sin consentimiento en la calle o te muestre sus genitales #NoEsBromaEsViolencia y es una situación real que sucede más de lo que pensamos”, expresó una cibernauta en Twitter.

Ante esta situación, Wapa.pe conversó con la actriz, improvisadora y directora de teatro Carol Hernández integrante de “Las Insolentes”, espacio de humor feminista.

Ante este hecho que ha provocado la molestia de miles de personas, le consultamos a la artista, ¿qué se entiende por humor negro o cómo debería serlo? Ya que muchos comediantes se escudan ante esta corriente para tocar algunos temas con extra ligereza.

“El humor negro, es este humor que se burla de lo que generalmente no se debe burlar, pero se usa para cuestionar ciertos temas, y se hablan temas incómodos, escatológicos o espinosos, pero no es burlarse del oprimido. Últimamente, estamos entiendo que el humor negro o humor ácido, es este humor que se burla de los sectores oprimidos y no pueden estar más equivocados”, explicó Hernández.

Como sabemos, en nuestro país, es común que el chiste fácil sea más acogido y replicado, pero ¿por qué el humor que se hace en el Perú siempre recurre a la burla y humillación?

La artista considera que el humor es reflejo de la gente, de lo que somos como sociedad, “el humor es una fotografía. Dime de qué te ríes y es lo que piensas”.

“El Perú es una sociedad como muchas en Latinoamérica que humilla al que es diferente, que no está dentro de la norma, al que no está dentro del canon aceptable. No nos burlamos del más grande, del poderoso, del racista, sino del que es racializado, ni del misógino o machista, sino de la mujer que sufre de machismo, porque somos una sociedad machista, entonces, si haces humor machista, eres machista”, indicó Hernández.

Además, lo que resaltó más es que “se recurre a la burla y a la humillación porque es nuestro modus operandis, nuestra manera de funcionar en esta sociedad es humillando al otro, no construyendo o valorando las diferencias”.

Por último, le consultamos, ¿por qué este tipo de humor tiene tanta aceptación? ¿qué dice de nosotros como sociedad?

“Riéndonos del que no está dentro de la norma, riéndonos de la mujer, de los sectores que son oprimidos, hacemos que se valide o se mantenga el status quo, que quienes están en el poder se mantengan y que las narrativas predominantes sigan siendo esas. Cambiar es muy difícil, para que uno deje de reír de este humor primero tendría que cuestionarme, es un ejercicio muy difícil la deconstrucción, porque nosotros como sociedad somos así”.

Tras la polémica generada por el presentador Hablando huevadas, el Ministerio de la Mujer reveló que el acoso sexual es un delito que se manifiesta en diversos espacios, entre ellos, el transporte público; las niñas y adolescentes son las más afectadas por su edad. Frente a ello, quien es testigo tiene el deber de actuar, acompañar y proteger a esta población vulnerable.

Las y los comunicadores cumplen un rol central para sensibilizar sobre esta álgida problemática social. Invocamos a quienes utilizan las diversas plataformas de comunicación a ser responsables en el tratamiento de la información que difunden.