Matrimonio infantil: Niña afgana es forzada a casarse con un pedófilo 46 años mayor

Frente a la crisis humanitaria en Afganistán, una niña de 9 años fue ofrecida y vendida por sus padres a un pedófilo 46 años mayor para que se casen. En condición de "niña esposa", la pequeña fue entregada a un hombre por 200.000 afganis, es decir unos US$ 2 200, en forma de ovejas, tierras y dinero en efectivo al padre.

Según un informe publicado por CNN, la compleja situación en el país hizo que la familia no "tuviera otra opción". Ellos vivían en un campo de desplazados en la provincia de Badghis, ubicado al noroccidente de Afganistán. Además sobrevivían gracias a la ayuda y el trabajo doméstico.

“Somos ocho parientes. Tengo que vender para mantener con vida a otros miembros de la familia”, comentó el padre de la menor, Abdul Malik.

Él dijo estar destrozado por la culpa, la vergüenza y la preocupación por lo que tuvo que hacer por culpa de la crisis actual. Previamente, Malik ya había vendido a su hija de 12 años.

La pequeña de 9 años esperaba cambiar la idea de sus padres, pues tenía el sueño de convertirse en maestra y no quería renunciar a su educación; sin embargo, súplicas fueron inútiles. Una vez vendida las posibilidades de continuar estudiando o seguir un camino independiente son casi nulas.

Según CNN, el padre lloró y le suplicó al comprador para que no la golpee a su menor hija. “Esta es tu esposa. Por favor, cuídala, ahora eres responsable de ella, por favor no la golpees”, dijo Abdul Malik.

El hombre solo asintió y la tomó del brazo para llevarla a la fuerza. “La arrastraron hasta el coche que la esperaba, que se alejó lentamente”, reseñó la cadena de noticias.

La situación actual de Afganistán ocasionó que muchas niñas sean vendidas para contraer matrimonio. Si bien ya era una situación registrada en la zona, la crisis humanitaria acentuó la situación. Actualmente, se profundizó la catástrofe, la ayuda internacional se agota y la economía del país colapsa.

Son decenas de familias las que tomaron decisiones desgarradoras, especialmente ahora que se acerca el invierno. “Es (un panorama) absolutamente catastrófico”, mencionó Heather Barr, directora asociada de la división de derechos de la mujer de Human Rights Watch. “No tenemos meses o semanas para detener esta emergencia (…) ya estamos en la emergencia”.

Es importante mencionar que, esta situación empezó a tomar fuerza debido a que los talibanes no les permiten el acceso a la educación a las niñas. “Mientras una niña esté en la escuela, su familia está comprometida con su futuro. Tan pronto como una niña deja la educación, de repente se vuelve mucho más probable que la casen”, matizó la experta. Es así como, junto a la incertidumbre, las familias optaron por empujar a sus hijas al "mercado matrimonial".

El Fondo de Población de las Naciones Unidas informó que el 10% de las niñas afganas de entre 15 a 19 años dan a luz cada año. Además, no tienen acceso a los métodos anticonceptivos ni a servicios de salud reproductiva.

De acuerdo al organismo, las tasas de mortalidad relacionadas con el embazado de las niñas de 15 a 19 años son el doble que las mujeres de 20 a 24 años. Ello porque muchas son demasiado jóvenes para dar su consentimiento para tener relaciones sexuales y enfrentan complicaciones en el parto.

Otro indicador es un informe realizado por la Unicef en el 2018, donde señalan que el 42% de las familias afganas tienen una hija casada antes de los 18 años. Los principales motivos son económicos y por la supervivencia de la familia, no obstante, la peor parte se la llevan las niñas. Ellas corren un grave riesgo por un parto complicado por su corta edad o sufren hasta violencia doméstica.

La fotoperiodista estadounidense Stephanie Sinclair compartió una imagen tomada en 2005 donde aparece una menor de 11 años junto a un pederasta tres décadas mayor que ella. Se trataba de un matrimonio infantil forzado, algo similar a lo que sucede en la actualidad.

La foto tiene 16 años de antigüedad, pero el regreso de los talibanes demostró solo una cosa: el retroceso en los derechos de las mujeres y niñas.

“A 20 años de la invasión estadounidense en Afganistán, que ha expulsado a los talibanes del poder, el mundo está siendo testigo de un retroceso dramático en la historia reciente de los derechos de las mujeres y las niñas”, escribió en su perfil de Instagram.

Durante sus 13 años de carrera fotografiando el matrimonio infantil en Afganistán, la fotoperiodista cuenta que presenció una situación que la horrorizó completamente. “Mi primer encuentro con el matrimonio infantil fue en Afganistán en 2003. Me horrorizó la historia de unas niñas que se prendían fuego a sí mismas. Después de investigar un poco, descubrí que una de las razones por las cuales tomaban esta decisión tan drástica era que las habían obligado a casarse siendo niñas”, comentó para la revista.

Stephanie Sinclair fundó una asociación en el 2012 para abogar por el fin de esta práctica que pone en riesgo a las niñas. Actualmente la asociación sin animo de lucro se llama Too Young Too Wed.

Con motivación en el Día Internacional de la Niña, Save the Children denunció que cada año mueren más de 22.000 niñas a causa de los embarazos y los partos derivados del matrimonio infantil. Esto significa que aproximadamente mueren 60 niñas al día, lo cual llama a abordar inmediatamente los riesgos actuales de la violencia de género.

Asimismo, según el informe, en África Occidental y Central se registra la tasa más alta de matrimonio infantil en el mundo. Es ahí donde se producen casi la mitad de todas las muertes estimadas relacionadas con el matrimonio infantil, es decir, 26 niñas mueren al día.