¿Cómo el Perú ha logrado convertirse potencia mundial en el ajedrez escolar?

El Perú, un país obsesionado con el fútbol y que vivió como una tragedia nacional el no haber clasificado al Mundial de Qatar 2022, obtuvo un nuevo campeonato mundial en ajedrez escolar.

Así lo dio a conocer el presidente de la Federación Peruana de Ajedrez, Jaime Ortega, quien en una entrevista a la BBC señaló que el pasado mes de junio, el Perú se impuso al resto de participantes en el Mundial de ajedrez escolar celebrado en Panamá.

"Perú es como Brasil en el fútbol", indica Ortega. "El rival que se enfrenta a un peruano sabe que lo va a tener muy difícil", agregó el directivo.

Cabe señalar que en el evento desarrollado en el país centroamericano participaron más de medio millar de ajedrecistas de 37 países del mundo. El Perú lideró el ranking al obtener siete medatas: tres de ellas fueron de oro en las once categorías disputadas.

Siguiendo con las declaraciones de Jaime Ortega, la clave del éxito del Perú fue el haber contratado a comienzos del siglo XXI al gran maestro ruso-peruano Georgui Castañeda como entrenador de ajedrecistas infantiles y juveniles.

"Él les enseño las técnicas y el conocimiento acumulado y sistematizado durante años por la escuela rusa y eso posibilitó que surgieran figuras como los hermanos Jorge y Deysi Cori", comentó Ortega al medio internacional.

En la actualidad, los hermanos Cori se han convertido en grandes maestros, mayor clasificación que otorga la Federación Internacional de Ajedrez, tras ser campeones mundiales escolares en Singapur en el año 2009.

Sin embargo, la gran estrella que ostenta el Perú a nivel escolar es Adamaris Machaca, quien a sus cortos nueve años ya maneja completamente estrategias en la ofensiva y posicional. Asimismo, puede presumir que ya es campeona del mundo.

Pero en toda historia de éxito, también hay momentos duros y ese es el poco apoyo del Estado. "Tuvimos que pedir el dinero y fue un momento bastante crítico para mi familia, pero el logro de Adamaris está ahí y es un orgullo gigante", expresó Luz, madre de Adamaris.

Un similar hecho ocurrió con Kate Azumi Bravo, quien se llevó la medalla de oro en el sub-15 femenino. Relató que ella empezó a jugar en el colegio y una vez que agarró el gusto por el deporte no lo volvió a dejar.

"Mi familia me apoya siempre, económicamente, y animándome a luchar hasta el final", señaló Kate quien su padre es un taxista y su madre, una empleada en el kiosko de su colegio.

El gran reto pendiente del Estado es garantizar el desarrollo social, educacional y deportivo de los estudiantes a nivel nacional, quienes pese a los logros, siguen sin obtener el apoyo de las instituciones públicas.