¿Dolor de espalda? Este sencillo estiramiento te relajará
Únete al canal de Whatsapp de WapaMuchas personas al llegar a casa nos recostamos sobre la cama y tratamos de aliviar el dolor de espalda que nos genera estar sentados en una silla. Estar muchas sobre un asiento repercute en la musculatura de la zona lumbar y de la pelvis, que tiende a acortarse.
Por ello optamos a recurrir diferentes tipos de ejercicios para contrarrestar el sedentarismo (caminar, correr, ir en bicicleta); sin embargo, estas actividades también también pueden dejar su impronta en la cadera y especialmente en la cadena muscular posterior, provocando que la red de tejidos que rodea los músculos de esa zona se vuelva rígida, lo que se traduce en sobrecargas y contracturas musculares dolorosas.
La cadena muscular posterior, formada por los músculos comprendidos desde la planta de los pies hasta la musculatura cervical, se interconecta a modo de una larga hilera de fichas de dominó. La estabilidad de un músculo influye directamente sobre los otros de la cadena que están a continuación, cercanos o a más distancia.
Es por ello que para que la base de la espalda se mantenga flexible y relajada te mencionamos algunas recomendaciones para liberar la tensión corporal y devolver a flexibilidad a las zonas lumbar, dorsal y cervical, y de los aductores, musculatura interna de las piernas. ¡Atenta!
Ejercicio para relajar la espalda
Los señala que realizar estiramientos devuelven a esta zona la flexibilidad perdida y liberan la tensión corporal. El ejercicio que proponemos permite el estiramiento de las zonas lumbar, dorsal y cervical, y de los aductores, musculatura interna de las piernas.
Es un ejercicio restaurador que relaja la espalda, flexibiliza la cadera, destensa las ingles y permite disfrutar de nuevo del movimiento sin molestias. A continuación, te describimos una de las posturas básicas de la RPG (Rehabilitación Postural Global).
Recostado boca arriba. En esta postura debes colocar los dos brazos en forma de "V" y con las palmas hacia arriba. Dobla ligeramente los codos.
Luego, junta las plantas de los pies y deja que las rodillas se abran hacia los lados y no tanto hacia abajo. La espalda no se ha de mover, ni se ha de curvar la zona lumbar, que debe tocar el suelo en todo momento.
Cabe mencionar que si el dolor de espalda permanece incluso siguiendo las instrucciones citadas anteriormente se aconseja acudir a un especialista.