Joven estudiante elabora accesorios para que gatos callejeros jueguen y duerman

Los gatos siempre han sido reconocidos como animales independientes que pueden valerse por sí mismo y que poseen un 'sexto sentido' capaz de prever cualquier situación de peligro. Sin embargo, los callejeros muchas veces no pueden con el maltrato ejecutado por el hombre y hacen que su vulnerabilidad corra peligro, tal como explicó Evan Tan a través de su canal de YouTube.

El joven estudiante de Singapur quiso ayudar a los felinos menos favorecidos que no cuentan con una familia con el objetivo de potenciar sus habilidades y puedan vivir en armonía junto al resto de su grupo y, especialmente, con los ciudadanos.

A través de sus redes explicó que en la ciudad de S'Pore estos animales no son muy bien recibidos y la tolerancia es mínima porque son considerados como una "plaga", pero él quiso terminar con esos pensamientos luego de acudir a la escuela de Diseño de Producto en Lasalle College of the Arts con el objetivo de elaborar un sistema para que los gatos lleven una vida pacifica.

Se trata del "Just Let Us Live Lah!" (solo déjanos vivir, lah), una estructura que irá instalado en diferentes partes de la ciudad, especialmente ubicado en las esquinas, que le permitirá a los mininos comer, descansar y jugar, ya que cuenta con tres espacios diferentes para la realización de dichas actividades.

Mediante su canal de YouTube Evan Tan mencionó que los diseños fueron denominados como: "Hábitos de alimentación", "Hábitos de descanso" y "Hábitos de curiosidad", ya que son las principales actividades que realizan los felinos.

"Qué genial trabajo, se nota su amor por las mascotas sin hogar", "Al igual que los perros, los michis también necesitan de un espacio cálido", "En diferentes partes del mundo está el invierno, hay que cuidarlos a ellos", fueron algunos comentarios que destacaron sobre la iniciativa "Just Let Us Live Lah!".

Asimismo, a través de YouTube, el joven reconoció que su trabajo fue inspirado en los residentes de la ciudad que cuidaban a los gatos callejeros, donde pudo conocer y adoptar a "Blackie", pero que tristemente partió hacia el descanso eterno luego de haber sido diagnosticada con un cáncer muy agresivo.