Ciudades donde morir es ilegal: 3 lugares en el mundo donde no puedes fallecer
Únete al canal de Whatsapp de WapaQuizás no lo sepas, pero en ciertas ciudades del mundo, la muerte puede ser un hecho aceptado, pero encontrar reposo eterno, es decir, ser enterrado, puede volverse una odisea. En estos lugares, el descanso final choca con la cruda realidad: la falta de espacio en los cementerios, lo que prohíbe realizarse entierros.
Con la saturación de campos santos y cementerios, hay algunas ciudades que ha optado por 'prohibir morir'. En esta nota conoce qué países son y por qué tomaron esta decisión.
- Biritiba-Mirim, Brasil
En el año 2005, las autoridades del gobierno de Biritiba-Mirim propusieron una medida insólita: prohibir la muerte. La razón tras esta propuesta radicaba en la saturación del cementerio local, donde las criptas ya se compartían entre los difuntos.
Como vemos en el informe anterior, el alcalde, Roberto Pereira Da Silva, informó que la iniciativa fue concebida como una protesta contra las restricciones federales que impedían la construcción de otro camposanto, por normativas ambientales.
- Longyearbyen, Noruega
Como reporta Unilad, en un inicio se indicó que esta ciudad 'prohibía morirse en sus tierras'. En realidad, lo que se prohibió fueron los entierros. TheNorwayGuide dice sobre esto: "No se permiten entierros por el frío que hay y evita que los cuerpos se descompongan. Los habitantes que mueren son trasladadas en avión a Noruega continental".
- Isla Itsukushima, Japón
Esta isla japonesa se erige como un sitio bendito, por lo que para preservar su pureza, se ha impuesto una prohibición única: no solo está prohibido morir, sino también nacer en él desde el lejano año 1868.
Este rincón de espiritualidad se distingue no solo por sus tradiciones venerables, sino también por haber sido reconocido como Patrimonio de la Humanidad desde 1996.
- Falciano del Massico, Italia
El portal It Caserta reportó en el 2018 que el municipio Falciano del Massico de la provincia de Caserta, había prohibido en el año 2012 morir en sus tierras. En aquel entonces, el alcalde Giulio Cesare Fava preparó una ordenanza que decía: "los residentes o, gente de paso, tienen prohibido cruzar la frontera de la vida terrenal para ir al más allá en este territorio".