¿Quieres descubrir sus secretos? Aprende cómo saber si una mujer está excitada con estas señales reveladoras

Cuando se excita una mujer no es tan notorio, como cuando lo hace un hombre, ya que en ellos se le nota por la erección. Pero no quiere decir que en la mujer tampoco no se vea, porque a ellas se muestra a través de cambios y sensaciones del cuerpo.

Entonces, se miran a través de estas señales, que pueden ser muy notorio para algunos hombres, pero para otros quizás no lo noten. Por ello, te vamos a dar a conocer algunos detalles para saber cuando una mujer está excitada.

Para empezar, cuando una mujer está excitada, experimenta un importante aumento de su temperatura corporal. Puedes darte cuenta la acaricias y besos, ya que notarás al tacto como su piel está mucho más caliente y se siente más acalorada de lo habitual.

También el olor de su piel presenta cambios y si la conoces bien, puede ser una señal que te indique que está excitada. Esto sucede por la segregación de las feromonas por el cuerpo, unas sustancias que envían señales olfativas.

Este con el objetivo de provocar comportamientos relacionados con el deseo sexual y la atracción. Así que estas algunos cambios que puedes notar en tu pareja, cuando estás previo al encuentro sexual.

Uno de los principales signo, cuando una mujer está excitada, es que comienza la lubricación vaginal. Ella comenzará a producir más flujo vaginal, el cual puede ser más o menos denso y presentar un olor u otro en función del momento.
La lubricación indica que la mujer está preparada para la penetración y gozar al máximo del coito. Ya que el flujo vaginal favorece que los movimientos sean más suaves e impide que sienta incomodidad o molestias.

También otra parte del cuerpo que muestra cambios cuando una mujer está excitada son los senos. Porque son muy sensibles a la excitación y lo más normal es que aumenten ligeramente, que los pezones se endurezcan y permanezcan erguidos.

Es preciso mencionar, que el clítoris es una de las partes del cuerpo femenino más delicadas. También una de las mayores armas de excitación sexual, ya que cuando está excitada, este aumenta de tamaño y se vuelve más sensible a las caricias y a cualquier forma de contacto.