Alcanza el éxtasis: Las poses sexuales que te guiarán al Punto G con intensos orgasmos
Únete al canal de Whatsapp de WapaEl Punto G es una de las zonas más buscadas por las mujeres, ya que promete un nivel de placer inigualable. Ubicado en el área clitorial de la vagina, su estimulación puede desencadenar sensaciones intensas y orgasmos increíbles. Sin embargo, es importante recordar que su posición varía en cada individuo.
Para descubrir el Punto G, es fundamental explorar el propio cuerpo mediante la masturbación. Armado con este conocimiento, puedes sugerir a tu pareja probar estas posturas altamente recomendadas para potenciar la estimulación de esta zona erógena.
QUIZÁS TE PUEDE INTERESAR: Descubre las mejores poses sexuales para bajar de peso ¡El resultado te sorprenderá!
El perrito
Estas es una de las posturas que la mayoría lo ha realizado, por ejemplo, la penetración intensa es la que se gana el protagonismo. Así que, llegar el punto G es muy fácil y sencillo, también esta pose ofrece encontrar un ángulo perfecto según cada persona se acople a los movimientos.
La profunda
Este es una de las poses que su nombre la describe, ya que busca llegar a la máxima profundidad vaginal. El hombre es quien controla y realiza toda la penetración, ya que la mujer debe tumbarse en la cama y levantar las piernas para que el pene pueda llegar al punto G.
La carretilla
Para esta posición, se requiere de un buen físico con mucha fuerza, ya que la mujer tiene las piernas apoyadas en los hombros de su pareja. También, él debe acomodarla con sus brazos mientras esta sostiene todo su peso.
Quizás te puede causar un poco difícil, el resultado va hacer muy excitante, aparte que facilita el acceso del pene hasta el punto G. Entonces es una de las mejores opciones que puede elegir para placer intenso.
El dominante
El dominante hace el pase a que la dama demuestre toda su destreza a través de sus movimientos sensuales por lo quien será penetrada es la que tiene todo el control. El hombre se echará boca arriba en la cama, mientras que ella se sube encima.
Ahora, el ritmo y la profundidad lo elige la mujer desde arriba, por lo que se recomienda practicar el movimiento de piernas y caderas. Es cuestión de ir con algunos movimientos suaves hasta llegar hasta encontrar tu objetivo.
De cucharita
Una de las posturas más conocidas, aquí el movimiento es simultáneo y el ángulo de la penetración son clave para alcanzar el punto G. Es preciso mencionar que, para disfrutar más, la mujer debe inclinar sus rodillas hacia adelante para que puedan penetrarla correctamente por detrás.
La amazona
Es una de las poses un poco complicadas, ya que el hombre debe tener un buen físico y fuerza para que pueda cargar a su compañera. Para esta postura, existen variantes en la forma en como carga a su pareja.
Desde primera, la mujer puede encargarse de los movimientos para que él pueda sostener sus piernas. Por otro lado, él puede impulsar su pelvis para penetrarla, de ambas formas, si es que se elige el ángulo correcto.
MÁS INFORMACIÓN: ¿Cómo afecta al pene o vagina el dejar de tener relaciones sexuales? Descubre el lado desconocido del sexo
La flor de loto
Este es una postura muy íntima para practicar en pareja y encontrar el punto G, deben ponerse cara a cara y acercan sus genitales. El hombre se siente con las piernas cruzadas, los tobillos cruzados entre los muslos o en cuclillas.
La mujer se sienta sobre él y envuelva sus piernas alrededor de su cintura, colocando sus pies contra sus nalgas. Luego con los movimientos continuos empieza la penetración, hasta a llegar el punto G que tanto esperabas.
Dulzura Oriental
Esta postura puede es una buena opción no solo para estimular el punto G, sino también para permitir el acercamiento a su pecho de ella, para poder besarlos o chuparlos. Ella se debe echar en la cama, pero con la espalda en curva, con las piernas ligeramente abiertas y las rodillas dobladas.
Luego, el hombre ingresa entre sus muslos de ella, elevándola suavemente por la pelvis para penetrarla. Es importante mencionar que la mujer debe ser pasiva, dejarse llevar y focalizar toda su atención en sentir.