Interpretación de la poesía de Vallejo que citó Sagasti: "No es una línea bonita más"
Únete al canal de Whatsapp de WapaSin duda, una de las mejores partes del discurso que dio el presidente Francisco Sagasti, durante la ceremonia de juramentación, fue citar los últimos fragmentos del poema “Considerando en frío, imparcialmente”.
Sin embargo, a muchos nos cuesta poder comprender que refiere el autor de este poema con tan bellas rimas. Por ello, la literata y traductora Claudia Gómez Molina explicó lo que el autor intentó plasmar en sus últimos párrafos.
“El poema construye la imagen del ser humano en todos sus aspectos mediante la enumeración de características presentadas con un tono objetivo, científico y distante. Enfatiza su ser perecedero y limitado, aniquilado por la rutina y los órdenes jerárquicos, perdido en las masas", señala.
La literata indicó que en los párrafos citados por Sagasti, se busca mostrar "la capacidad de profundidad e introspección del hombre: su vacío y tristeza, el hambre de conocimiento. Contrapone los aspectos más bajos, como sus características animales y “su retrete”, aspectos asociados a la vergüenza que quisiéramos esconder y negar, con los éxitos y logros de la historia: las medallas, los avances científicos".
Claudia Gómez sostiene que los últimos párrafos del poema que escribió César Vallejo, se "celebra la capacidad de resiliencia del hombre y sugiere la reconciliación y aceptación con sus carencias y faltas. Acoge al ser humano tal y como es, con una emotividad que contrasta y termina ganando la victoria sobre el tono racional y científico del poema. Sugiere que los sentimientos de hermandad y compasión tienen la última palabra y finalmente prevalecen por sobre todo lo demás”.
Para Gómez Molina, este verso al final de su discurso no es una línea bonita más. Es una declaración de principios. Nos está diciendo su visión del mundo y de lo que quiere como país: ciencia, racionalismo, humanismo y solidaridad.
¿Cuál es el poema de César Vallejo que leyó Francisco Sagasti?
Considerando en frío, imparcialmente…
Considerando en frío, imparcialmente, que el hombre es triste, tose y, sin embargo, se complace en su pecho colorado; que lo único que hace es componerse de días; que es lóbrego mamífero y se peina…
Considerando que el hombre procede suavemente del trabajo y repercute jefe, suena subordinado; que el diagrama del tiempo es constante diorama en sus medallas y, a medio abrir, sus ojos estudiaron, desde lejanos tiempos, su fórmula famélica de masa…
Comprendiendo sin esfuerzo que el hombre se queda, a veces, pensando, como queriendo llorar, y, sujeto a tenderse como objeto, se hace buen carpintero, suda, mata y luego canta, almuerza, se abotona…
Considerando también que el hombre es en verdad un animal y, no obstante, al voltear, me da con su tristeza en la cabeza…
Parte citada por Francisco Sagasti
Examinando, en fin, sus encontradas piezas, su retrete, su desesperación, al terminar su día atroz, borrándolo…
Comprendiendo que él sabe que le quiero, que le odio con afecto y me es, en suma, indiferente…
Considerando sus documentos generales y mirando con lentes aquel certificado que prueba que nació muy pequeñito…le hago una seña, viene, y le doy un abrazo, emocionado. ¡Qué más da! Emocionado… Emocionado…
¿Francisco Sagasti es ateo?
El actual presidente de Perú es ateo y humanista, según la literata y traductora.
"Así como otros presidentes hasta el cansancio aludieron a alguna divinidad o a alguna estampita religiosa, la alusión de Sagasti está basada emitentemente en los principios del humanismo secular", agregó Gómez.
Cabe señalar que, Sagasti juró como presidente del Perú sin tomar en cuenta a la Biblia. No hubo Biblia durante la ceremonia ni juró ante Dios cumplir con los mandatos presidenciales.