¡Con ingredientes caseros! Conoce 3 mascarillas nocturnas que rejuvenecerán tu piel
Únete al canal de Whatsapp de Wapa¡Lo puedes preparar en tu casa! Las mascarillas faciales son una manera excelente de hidratar y mejorar el estado de nuestra piel. Hay muchos productos a nuestro alcance en el mercado, pero si no nos decidimos por ninguno de ellos o queremos disfrutar de los beneficios de las mascarillas naturales en casa también podemos hacerlo.
Una piel radiante se construye de manera intensa en la noche. La falta de sueño, estrés, e incluso no desmaquillarse correctamente, son factores que le quitan luminosidad a tu rostro. Pero esto tiene solución: las mascarillas nocturnas.
Te compartimos tres face masks realizado por la editora de la revista Vanidades, que puedes hacer en casa y usando solo ingredientes naturales.
Mascarilla de miel
Hay muchos beneficios en incorporar la miel a tu rutina de belleza. Este es un ingrediente con propiedades antiinflamatorias e hidratantes, así que ponerlo sobre la piel mejorará la circulación y aumentará la luminosidad natural.
Necesitas: 1 cucharadita de miel natural.
Procedimiento: Aplica la miel sobre tu cara y déjala actuar toda la noche. A la mañana siguiente, lava el rostro con un limpiador. Puedes aplicar la mascarilla 3 veces a la semana.
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Mascarilla de avena y miel
A la miel le complementa la avena para absorber las impurezas del rostro. Ideal para todo tipo de piel.
Necesitas: 2 cucharadas de avena, 2 cucharaditas de miel natural.
Procedimiento: Mezcla los ingredientes y déjalos reposar por 5 minutos hasta que la avena se suavice. Luego, hazla puré y procede a ponerla en tu rostro. Déjala actuar toda la noche, al día siguiente verás cómo restauró e hidrató la piel.
Mascarilla de aceite de almendras
Los aceites naturales mantienen la piel hidratada y quitan las células muertas; en el caso del aceite de almendras, evita que las venitas se tapen y mejora la complexión de la piel.
Necesitas: 1 cucharadita aceite de almendras, 1 cucharada de gel de aloe vera.
Procedimiento: Mezcla los ingredientes (puedes añadir un poco de cúrcuma), aplícala en la piel, deja que se seque y vete a dormir. Al día siguiente, retira con suavidad.