Magaly tuvo que convencer a su esposo para posar en sesión de fotos navideñas: “No estoy acostumbrado” [VIDEO]

En la reciente edición de ‘Magaly TV: La Firme’, Magaly Medina contó todos los detalles de la primera sesión de fotos navideñas que protagonizó junto con su esposo Alfredo Zambrano y sorprendió al revelar que el notario se sentía incómodo al posar frente a las cámaras.

La popular ‘Urraca’ contó que, aunque todos los años se hacen fotografías en su casa, esta vez decidió hacerlo en un set y tuvo que convencer a su esposo para que posara junto a ella.

“Siempre la había hecho en mi casa, nos tomamos fotos en la familia. Esta vez decidí convencer a mi esposo de acompañarme”, dijo la periodista.

En las grabaciones, la pareja tuvo que cambiar de atuendo en varias oportunidades y sacar su lado creativo frente a las cámaras, lo que hizo que el famoso notario se sintiera incómodo y hasta avergonzado.

“De verdad, (Magaly) me dijo solamente un par de fotos... es con atuendo y todo incluido. Sí claro, es la primera vez... no estoy acostumbrado”, dijo Alfredo Zambrano.

Mientras que la pelirroja contó que le resultó “más o menos difícil convencer” a su esposo, pero ella sabe los trucos para convencerlo. “Yo siempre sé cómo convencerlo, tengo mis truquitos”, contó.

La ‘Urraca’ aseguró que la Navidad es una de sus épocas favoritas del año y que acostumbra a decorar desde el 01 de noviembre pues disfruta mucho de estas fiestas.

“Yo no soy ninguna ‘Grinch’, yo amo la Navidad, es mi fiesta preferida del año, ni siquiera mi cumpleaños me gusta tanto como la Navidad. Como saben, mis árboles están desde el primero de noviembre bien armaditos”, expresó.

La periodista de ATV confesó que desde su infancia siempre buscó celebrar la Navidad, aunque no contara con los recursos para hacerlo.

“Y a mí que me encantan los árboles de Navidad, es que yo he sido pobre, no he tenido árbol de Navidad, yo he contado que cuando era pequeña con mi hermana iba y buscábamos un tronquito seco, lo pintábamos, lo poníamos en un latón, en una lata de pintura que forrábamos con arena y le poníamos las pocas bolitas que la economía familiar podía comprar”, recordó.