Cuando Juliana Oxenford develó que su tío la agredió sexualmente cuando era niña: "No me creyeron"

Juliana Oxenford decidió usar sus redes sociales para hablar de cuando fue víctima de violencia por parte de un familia cuando aún era niña, esto lo hizo luego de que conociera las burlas de los comediantes Ricardo Mendoza y Norka Gaspar sobre la violencia a la mujer.

Frente a ello, la periodista contó su experiencia en carne propia y pidió no hacer mofa de una situación tan delicada como esta, sobre todo cuando es una lucha constante entre los peruanos.

"No hagas mofa, no te burles de una agresión sexual. Menos si la victima es una niña. Cuando tenía ocho años el tío más querido de mi familia me besaba en la boca, aprovechaba cualquier momento a solas para meterme la lengua y babosearme (si, así de nauseabundo). No dije nada", se lee en un principio.

Seguido, explicó cómo esta parte de su vida la marcó para poder levantar su voz y mostró su rechazo hacia la burla de la historia de una niña que fue acosada en un bus.

"A los ocho años no sabía si eso que tanto me asustaba era abuso o lo hacía porque era “su sobrina favorita”. Nadie me habló de la importancia de hablar. Cuando de adolescente decidí hacerlo, muchos no me creyeron. No pasó nada, el tiempo parecía haberlo borrado todo", contó.

"Por eso, escuchar a dos ignorantes burlándose del tema me remonta al pasado, me duele, reaviva mi herida. Hay que ser muy maldito para creer que la violencia sexual- en cualquiera de sus formas- puede convertirse en chiste", expresó Juliana, quien finalmente señaló que no volverá a hablar del tema. "No diré nunca más nada sobre este tema. Lo cuento porque tanto abuso me recuerda a la niña que fui", finalizó.

Si has sido o conoce a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, puede comunicarse de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.

Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).