Orgasmo femenino versus orgasmo masculino ¿En qué coinciden y se diferencian?
Únete al canal de Whatsapp de WapaEl placer es natural y parte del encuentro sexual entre las parejas. Sin embargo, un hombre o una mujer no reaccionan de manera igual cuando su excitación llega al punto máximo es decir; "cuando llegan al orgasmo".
Los psicólogos definen al orgasmo como el climax o la respuesta de un constante estímulo en el cuerpo que se ha dado durante el proceso de excitación. Pero ¿cómo reacciona nuestro cuerpo cuando llegamos al orgasmo? y ¿cómo funciona el cuerpo de ellos?
Recuerda que tanto hombre como mujer tienen sus propios órganos reproductivos, físicamente y emocionalmente no somos iguales. Tenemos un mismo fin: sentir el placer, pero no lo demostramos igual.
Cómo reconocer el orgasmo femenino
En el acto sexual es normal que se estimule el punto G, clítoris y la zona vulvar hasta que finalmente tu cuerpo llegue al famoso "orgasmo".
Lo que sucede en el cuerpo de una mujer al llegar al orgasmo es lo siguiente:
Los latidos de su corazón aumenta, del mismo modo, sucede igual con la respiración y la presión arterial. En nuestra zona íntima, el útero se contrae y finalmente también la plataforma orgásmica, clítoris y esfínter anal.
Después del orgasmo, una mujer puede volver a tener más otros más, debido a que es multiorgásmica, sin embargo, en el caso de los hombres no sucede lo mismo.
Orgasmo masculino
Puede durar un tiempo de 4 a 8 segundos, ellos lo sienten como si tuvieran varias sensaciones a la vez. También aumentan su respiración, presión arterial y latidos del corazón. En el caso de su zona íntima, se contrae su pene, esfínter y uretra. Finalmente, expulsan "semen".
Después de este orgasmo, el hombre comienza a pasar a un estado refractario, es decir un periodo de recuperación, pues durante ese tiempo, el hombre no podrá sentir otro orgasmo. Tendrá que pasar un poco de tiempo. Hay algunos hombres que esperan más y otros menos minutos para volver a repetir el acto sexual.
¿Qué es un orgasmo?
El orgasmo es la culminación de una relación sexual, un clímax que produce una sensación de liberación repentina y placentera de la tensión acumulada desde el momento en que se inicia la fase de excitación. Es en ese momento en que se generan una serie de espasmos musculares intensos que resultan altamente agradables, a lo que ayuda la liberación de endorfinas que se produce de forma simultánea.